Una carta escogida por el público es cortada en trocitos e introducida en una caja a la vista de los espectadores, esta se cierra y al abrirla la carta aparece totalmente recompuesta. También se puede hacer a la inversa el juego, que la carta completa se transforme en pedacitos. Permite también que se realice una predicción desde un papel blanco a un papel escrito un billete roto y recompuesto, una infinidad de ideas, con este sencillo elemento que tendrás en tus manos, nada más que una caja.